Capitulaciones reales en la Historia de España

17.06.2014 15:57

Las capitulaciones y el régimen de separación de bienes, en lugar del de gananciales, entre miembros de la Familia Real española, incluyendo reyes y reinas, ha sido una constante en la historia de nuestro país. Vayan, pues, unos ejemplos a modo de introducción.

La reina Isabel II, “la chata”, exiliada en Paría a raíz de la Revolución Española de 1868 –conocida como La Gloriosa- se separó de su esposo Francisco de Asís de Borbón y Borbón-Dos Sicilias, al que llamaban Paquita dada su condición homosexual, el cual hacía tiempo que compartía departamento con su “secretario personal”, Antonio Ramos de Meneses. Tuvo, la reina exiliada, que empeñar o vender gran parte de sus joyas para poder pagar la pensión estipulada a su consorte en cumplimiento de las capitulaciones matrimoniales que habían acordado previas a la boda.

Otro caso más reciente en el tiempo fue el del bisabuelo del aún Príncipe de Asturias, el rey huido de España, Alfonso XIII, al proclamarse fraudulentamente la II República. Tan ruin y villano era el rey huido, que dejó de pagar la pensión a la que la reina consorte Victoria Eugenia tenía derecho merced a un acuerdo firmado entre los reinos de España y Gran Bretaña en 1906, alegando que como España ya no era un reino sino una república las capitulaciones carecían de validez. Tuvo que esperar a que el general Franco, Jefe del Estado español, restaurara el reino de España en 1947 para volver a percibir la pensión a la que tenía derecho, incluidos los atrasos, lo que le permitió vivir dignamente en su dorado exilio suizo de Ville Fontaine hasta su deceso ocurrido en 1989.

Siguiendo esta costumbre instalada en casi todas las monarquías europeas, los Príncipes de Asturias, firmaron ante notario, sus capitulaciones matrimoniales  en caso de separación o por nulidad caónica matrimonial.

Un antiguo preceptor de Felipe de Borbón, don Aurelio Menéndez, fundador del prestigioso bufete de abogados Uría Menéndez, es el encargado de redactar el régimen de separación de bienes con el que contraerían matrimonio, la plebeya, Letizia Ortiz Rocasolano y el heredero de la Corona de España.

Un extenso protocolo de 40 folios

David Rocasolano, primo hermano de Letizia y, entonces, su abogado personal echó, a petición de la interesada, un vistazo al documento final. "Yo era un abogado joven –recordaba Rocasolano-, pero ya había leído centenares de capitulaciones matrimoniales. Suelen tener dos o tres folios. El legajo que me entregó Letizia tendría 40 o 50", añadiendo después "en caso de separación, mi prima no iba a tener problemas. Le quedaba una asignación. Algo más que una asignación, se debería decir. Una residencia de verano y otra de invierno. O sea, también algo más que una residencia. Con su servicio y sus cosas. La vida solucionada, en resumen".

Según Rocasolano, Letizia también solicitó la aprobación del documento a su actual cuñado, Jaime del Burgo, marido de su hermana Telma, de los que se halla totalmente distanciada por mor a unas desafortunadas indiscreciones vertidas por él ante algunos periodistas.

En aquel momento, uno de los puntos más difíciles de asumir y aceptar por parte de Letizia Ortiz fue el concerniente a la guarda y custodia de sus futuros descendientes. En la actualidad, las infantas Leonor de ocho años y Sofía de seis, en el caso de ruptura matrimonial, seguirían residiendo en La Zarzuela al quedar otorgada su custodia al padre Felipe de Borbón. También sería la Casa Real la encargada de la instrucción y formación de las infantas, motivo por el cual es difícil que el matrimonio se rompa oficialmente, por lo menos por parte de la Princesa de Asturias. De todas formas, según Gabriela Domingo, vicepresidenta de la Asociación Española de Abogados de Familia, "no se puede renunciar a los derechos futuros, y menos negociar con los derechos de los menores; en este punto, un acuerdo prenupcial tendría poco valor".

Otro punto contemplado en las capitulaciones es el estatus en el que quedaría Letizia Ortiz en caso de que cesara la convivencia matrimonial. En el caso de una disolución canónica del matrimonio, perdería todas sus dignidades y tratamiento. Si el matrimonio simplemente se separase mantendría tanto el título de reina consorte, una vez haya ascendido al trono el futuro Felipe VI de Borbón y Grecia, y el tratamiento de Majestad, así como los honores correspondientes a su Dignidad establecidas en el ordenamiento jurídico dispuesto en el Real Decreto de 6 de noviembre de 1987 sobre la cónyuge del Rey.

Recordando el caso de Jaime de Marichalar y el ducado de Lugo, el historiador Fernando García Mercadal declaraba “es una tradición que se mantiene en el terreno de los títulos nobiliarios, donde el consorte, si se rompe la unión, debe dejar de usar el título no sólo de derecho sino también socialmente".

En cuanto a la residencia de Letizia, en el supuesto caso de ruptura, poco había que negociar ya que el Pabellón del Príncipe e incluso el propio complejo de La Zarzuela son propiedad del Patrimonio Nacional, otra cosa sería entrar en el terreno de los obsequios, joyas u otros regalos, que Letizia hubiera recibido como princesa o reina consorte y no a título personal. Pero eso sería especular con el asunto según citan fuentes especializadas.

Lo que, hoy por hoy, parece poco probable es que los futuros reyes tomen una decisión tan dramática sobre todo por parte del futuro rey educado en la más tradicional fe católica. No parece tan imposible que sea Letizia quien pudiera tomar una decisión de semejante calibre pues, como comenta Raúl del Pozo en su columna de El Mundo, cada vez se muestra menos discreta y al menos “tres altas autoridades del Estado han sido testigos en los últimos tiempos de broncas entre Don Felipe y Doña Letizia".

Más extemporáneo fue el enfrentamiento que el pasado 5 de enero mantuvo la Princesa y con una reportera gráfica, según informó la periodista Marisa Martín Blázquez, “Cuando la esposa del Heredero se dio cuenta de que le estaban tomando unas fotografías en la cabalgata de Pozuelo de Alarcón, cruzó la calle y mantuvo con ella una agria disputa a pie de acera:

-¡De ninguna manera voy a dejar que me fotografíes! Eso vale mucho dinero.

Mientras, al otro lado de la calle –contaba la periodista-, el Príncipe permanecía indiferente ante la actuación de su esposa. Ni siquiera la miraba”

El prestigioso columnista del diario de tirada nacional El Mundo, otrora dirigido por el defenestrado Pedro J. Ramírez, Raúl del Pozo, abría su columna publicada en la contraportada de la edición del día 29 de enero de este año con el siguiente párrafo: "En el Palacio Real siguen las sombras de Antonio Pérez, la princesa de Éboli y 'Lady Di'. Tal es el grado de intriga, que sospecho que la abdicación del Rey sería un riesgo para la estabilidad del país y para la Monarquía parlamentaria, ya tocada con otros escándalos que nos asedian".

Y es que a los futuros reyes parece que les esté pasando una locomotora por encima. Días después, y en el mismo medio, las periodistas Cote Villar y Consuelo Font publicaban un artículo que decía  “Si, como decía el teórico de la comunicación Marshall MacLuhan, ‘el medio es el mensaje’, el hecho de que fuera uno de los más destacados opinadores del país quien glosara los desencuentros provocó aún más a la opinión pública. La crisis del matrimonio de los Príncipes de Asturias, que al día siguiente Zarzuela describió como ‘una relación con altibajos’, está ya encima de la mesa y ha salido de las sombras”.

Y para rematar, el propio Raúl del Pozo: "El artículo que yo escribí estaba lleno de guiños e insinuaciones, no decía nada, pero lo decía todo", reconociendo que solo había plasmado una “décima parte” de lo que se cocina en La Zarzuela.

Pues menos mal que fue comedido el bueno de Raúl ¿qué ocurriría si esos ‘altibajos’ que reconoce la Familia Real que parecen, a ojos de no pocos, una gigantesca ola se convirtiera en un auténtico tsunami? ¿cuál sería el escenario que se encontraría la republicana Letizia en un futuro inmediato? Y ¿cuál sería el futuro de la monarquía en una España cada día menos monárquica?

 

 

 

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